Las chinches de las camas pertenecen a la familia Cimicidae.
Las chinches de las camas son extremadamente eficientes en encontrar y extraer sangre de los huéspedes para su alimentación, atacando frecuentemente las áreas del cuerpo más expuestas durante el sueño, como la cara, el cuello, los hombros, los brazos y las piernas.
Las señales de infestación de chinches de las camas son pequeñas manchas de sangre de color teja en las fundas de las almohadas, las sábanas, los colchones y las bases divididas.
Viven en un entorno cerca de donde viven sus fuentes de alimentos, en abrigos construidos en lugares secos o que posean poca o ninguna luminosidad y flujo de aire mínimo, como grietas y hendiduras en paredes, dentro de armarios y otros muebles, canastas de ropas, colchones, almohadas, marcos, alfombras, sommiers, interruptores, enchufes y maletas de viaje.
La dispersión empieza cuando los chinches se adhieren a equipajes, ropas, medios de transporte, como barcos, aviones, trenes, buses y autos.
No transmiten enfermedades a los seres humanos. Algunas personas son alérgicas a las picaduras, esto se debe a un poco de saliva es liberada cuando el insecto perfora la piel causando comezón y hinchazón en el sitio.